Datos básicos
Título original: Rocky
Año: 1976
Duración: 119
País: Estados Unidos
Datos técnicos y artísticos
Dirección: John G. Avildsen
Guion: Sylvester Stallone
Música: Bill Conti
Fotografía: James Crabe
Reparto: Sylvester Stallone, Talia Shire, Burt Young, Carl Weathers, Burgess Meredith, Thayer David, Joe Spinell
Productora: United Artists
Sinopsis
Rocky Balboa es un desconocido boxeador a quien se le ofrece la posibilidad de pelear por el título mundial de los pesos pesados. Con una gran fuerza de voluntad, Rocky se prepara concienzudamente para el combate y también para los cambios que acabarán produciéndose en su vida. (FILMAFFINITY)
Premios
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1976: Oscars 8 nominaciones ( Mejor dirección, Mejor actor, Mejor sonido, Mejor actor de reparto, Mejor guión, Mejor actriz, Mejor montaje, Mejor canción ) | 3 premiadas ( Mejor película, Mejor director, Mejor montaje ).
1976: Globos de Oro 6 nominaciones ( Mejor película, Mejor dirección, Mejor Actor, Mejor BSO, Mejor actriz, Mejor guion ) | 1 premiada ( Mejor película ).
1977: BAFTA 5 nominaciones ( Mejor película, Mejor dirección, Mejor actor, Mejor guion, Mejor montaje ) | 0 premiadas ( ).
Comentario
“Rocky” es una película de Sylverter Stallone, que en 1976 llevó a la pantalla la historia de Rocky Balboa un boxeador algo mayor que se gana la vida con combates de tres al cuarto para sobrevivir, mientras se gana la vida recuperando el dinero de un matón del barrio que lo presta a altos intereses.
Una frase suya que se comenta en la película es la siguiente: “Aférrate a tus sueños y no dejes que nadie te derrote”, ese el mensaje de Rocky, en la película que lanzó al estrellato a Sylvester Stallone.
Además dentro del género de boxeo es una de las más importantes, no por sus peleas que la verdad que son demasiado exageradas, en un mundo como este, que es más bien técnico, sino porque es una saga que hasta la fecha van 7 películas y en 2018 se estrena una octava.
De joven, Sylvester Stallone tenía en claro a que quería dedicarse: él quería ser actor de películas. ¿Por qué? Porque quería inspirar a la gente sobre lo que una persona es capaz de lograr.
Entonces en Nueva York fue rechazado más de 1500 veces en las agencias de películas a las que se presentaba. Y en ese entonces estaba casado con una mujer que le decía: “búscate un trabajo”, pero él sabía que si se buscaba uno empezaría a perder el hambre de gloria.
Y es por aquellos entonces cuando le vendrá la afición a escribir guiones. Al irse quedando sin dinero y sufrir el frío invernal de Nueva York, un día se fue a la New York Public Library, no para leer sino para protegerse del clima. Ahí, una persona dejo un libro en la mesa y él lo tomó: era un libro de Edgar Allan Poe.
Según palabras de Stallone: “Poe me hizo salir de mí mismo, me hizo pensar cómo puedo tocar a otras personas, a no preocuparme tanto por mí mismo“.
Durante un tiempo siguió en la pobreza y terminó vendiendo las joyas de su esposa, quien al final se separó de él. Sin mujer, sin dinero, sin comida y con su amado perro como compañía parecía no tener futuro. Y en un momento dado las cosas se pusieron tan mal, que terminó viviendo en la calle durante 3 días, en la estación de autobuses de Nueva York.
Incapaz de pagar el alquiler o comprar comida, tuvo que recaer en el punto más bajo de su vida, vender a su perro a cualquier desconocido que pasara por una tienda de licores. No tenía dinero para seguir alimentándolo y lo terminó vendiendo por $ 25. Cuenta que ese fue el día más triste de su vida y que se fue llorando.
Ese día fue un punto de inflexión que llegó a su culminación, cuando dos semanas después estaba mirando una pelea entre Muhamad Alí y Chuck Wepner, un desconocido que puso en apuros al campeón, en ese momento algo hizo ‘un click’ en la cabeza de Sylvester.
Fue entonces cuando comenzó a escribir durante 20 horas seguidas sin dormir… ¿qué escribió? Nada más y nada menos que la historia de Rocky, un texto que muchos rechazaron en un principio calificándolo como “predecible, estúpido, etc.”
Posteriormente acabaron aceptando su guión que les encantó y le ofrecieron 125.000 dólares por el mismo. De esta forma, Sylvester veía que su sueño se hacía realidad hasta que el actor les dijo, ni corto ni perezoso: “ah, una cosa más, yo voy a ser el actor principal”.
“¿Qué? Noooooo. ¿De qué estás hablando? Eres un guionista. Necesitamos un actor conocido para el filme”, le respondieron en los estudios de cine.
“No”, dijo Stallone, “También soy actor. Esta es mi historia y yo soy Rocky“. “No”, le contestaron. “Tómalo o déjalo”. Y Stallone se fue, no aceptó esas condiciones.
Lo llamaron unas semanas después ofreciéndole 250,000 dólares para comprarle el guión y con la condición que no actuara como Rocky en la película.
Lo rehusó de nuevo. Le ofrecieron 325,000 dólares para comprarle el guión. Se rehusó también, él quería ser Rocky.
En el año 1975, hacía años que Sylvester Stallone luchaba por tener éxito como actor en casi cualquier categoría, sin ver los resultados.
Finalmente y después de varias negociaciones, accedieron a dejarlo actuar, pero le pagarían sólo 35.000 dólares. Y la película solo invirtieron 1.000.000 de dolares en total, menos de la mitad de lo que en principio hubiera costado si un actor de renombre la hubiera interpretado.
Y lo primero que hizo Stallone con el dinero, fue regresar a la tienda de licores a donde había vendido a su perro. Aguardó varios días hasta que apareció el hombre al que que se lo había vendido. Y quiso comprarlo, pero la contestación fue rotunda: “No. Es mi perro ahora y no se vende”. Stallone le ofreció entonces 15.000 dólares y un papel en la película.
El perro que aparece en la película Rocky, es el verdadero perro de Silvester Stallone.
La película ganó los Oscar a Mejor Película, Mejor Dirección y Mejor Montaje. Incluso fue nominado a mejor actor.
La película Rocky sigue incluida como una de las más exitosas de la historia del cine americano. Es curioso que le dijeran que era mal actor y estuviera nominado a esa categoría. Cuando subió a coger el Oscar a mejor película Sylvester Stallone leyó todas las frases que le dijeron en su día sobre lo mala que era esa historia que intentaba vender a las productoras. Y además la película obtuvo unos 225 millones de recaudación, yo creo que con ese coste tan escaso los beneficios fueron increíbles.
El boxeador real en el que se basó Sylvester Stallone, para esta primera y segunda película, apodado como “El sangrador de Bayonne” por la facilidad con la que sangraban sus cejas en cada pelea, hacía tiempo que para Chuck Wepner se habían acabado los grandes combates.
Desde 1964, acumuló 35 victorias (17 por K.O.), 14 derrotas y dos empates, había sido derrotado por los mejores púgiles de la época como Sonny Liston o George Foreman y a sus 37 años su mejores tiempos habían pasado. Se ganaba la vida boxeando en pequeños clubes, mientras empezaba a sopesar qué hacer con su vida cuando ya no pudiese subir al ring.
Sin embargo, tuvo un golpe de suerte cuando a través del promotor Don King le llegó la oportunidad de pelear por el campeonato de los pesados el 24 de marzo de 1975. King lo había organizado todo para que George Foreman pudiese defender el título ante un boxeador de poca monta, un espectáculo fácil por el que Wepner se embolsaba 100.000 dólares.
El objetivo era resistir lo máximo posible y cumplir con el combate esperado. Sin embargo hay que remontarse al 30 de octubre de 1974. Porque hubo un combate histórico en el Estadio 20 de Mayo de Kinshasa (Zaire) acogió el combate más célebre de la historia. The Rumble in the Jungle (El rugido en la selva) convirtió a Muhammad Ali en una leyenda del boxeo.
Aquel día aguantó ocho asaltos el castigo del campeón George Foreman y Mohamed Ali consiguió enviarle a la lona en el noveno para hacerse con un triunfo que nadie esperaba.
Ali forjó su leyenda en el corazón de África y recuperó un título que no se le había permitido defender por negarse a hacer el servicio militar en plena Guerra de Vietnam. Con el triunfo, el púgil más famoso de todos los tiempos también tuvo que asumir aquel combate que se había planeado para Foreman ante el tal Chuck Wepner.
El 24 de marzo de 1975, en el Richfield Coliseum (Ohio), Mohamed Ali inició su primera defensa del campeonato de los pesados ante Wepner con su habitual espectáculo de provocación y bromas en una pelea por la que se iba a embolsar 1,5 millones de euros. En virtud de lo esperado, Wepner, haciendo honor a su apodo, no tardó en comenzar a sangrar con abundancia por sus cejas mientras trataba de mantenerse en pie.
Ali quería cerrar cuanto antes la pelea cuando recibió por sorpresa un golpe de izquierda de su oponente. Retrocedió, se balanceó y, ante el asombro de todos los presentes, cayó al suelo. Hasta entonces, solo Joe Frazier había conseguido tumbarlo sobre la lona de un ring. “Eh, le he tirado”, se dirigió Wepner hacia su preparador. “Sí, pero ahora tiene pinta de estar muy cabreado”, le contestó.
Lo que vino después fue una avalancha de golpes de Ali que, dolido en su orgullo, ya no sólo quería ganar la pelea, quería logar el KO de su rival. Wepner resistió hasta el último asalto. Apenas podía levantar los brazos para defenderse, deambulaba por el ring mientras continuaba encajando golpes. 19 segundos antes de que sonase la campana, un directo en pleno rostro dio por finalizado el combate.
Había conseguido resistir los 15 asaltos y había hecho historia tumbando al mismísimo Ali. El perdedor había ganado más reconocimiento que en toda su carrera. Sentado presenciando el combate se encontraba Sylvester Stallone que vio en aquella historia el guión perfecto. Contactó con Wepner y dos años después Rocky se hacía con el Oscar a la Mejor película.
A pesar del vuelco que había dado su vida, el boxeador pasó por la cárcel por tráfico de drogas y aseguró que nunca recibió nada de los beneficios de la película. En 2003 presentó una demanda y, tras tres años, llegó a un acuerdo privado con Stallone para recibir una compensación por inspirar la vida de Rocky Balboa, un perdedor que ha quedado para siempre en la historia del cine.
Según palabras de Sylvester Stallone: “Chuck era un boxeador que todos consideraban una broma. Todos pensábamos que Ali lo destrozaría enseguida. No había nadie que afirmara lo contrario.
En realidad, la apuesta giraba en torno a qué tanto castigo soportaría y cuánto dolor podía soportar. Así que me senté tranquilo a presenciar el combate junto a una masa de espectadores hambrientos de sangre. La verdad, él ni siquiera lucía como un boxeador y el espectáculo era muy triste, hasta que llegó la gran sorpresa: Wepner le aguantaba la pelea y de repente, lo tumbó. No lo podíamos creer. La gente enloqueció y comenzó a apoyar a Wepner.
Se ganó el corazón de todos por su entrega y dignidad y nos puso a pensar: Si él puede, todos podríamos”. Fue una lección de dignidad que me hizo pensar inmediatamente en llevar la historia al cine y así comenzó Rocky”, cuenta Stallone a una periodista.

El cine es el reflejo de la realidad. Aún con las apuestas 30 a 1 en contra, Wepner le mostró al mundo que podía pelear por su opción a fracasar a su manera (y por los 100 mil dólares que le ofrecieron). A ser derrotado con la frente en alto y con Ali aplaudiéndole la entrega, la fuerza y la garra para mantenerse de pie, un hecho que casi logra, ya que fue hasta los últimos 19 segundos del último round que Ali pudo derrotarlo.
“Un ancho bloque de corazón y sueños, uno de los últimos peleadores de clubes, de esos que te dan todo lo que tienen, que convierten al ring en un mar púrpura y siguen pidiendo más… ese es Wepner“. Así lo definía Sports Illustrated, como un peleador de esos que ya no se hacen: de puro corazón. Un luchador que, de acuerdo con Stallone, le permitió crear a un icono de todos los tiempos y uno de los personajes más emblemáticos en la historia del cine.
Con esa premisa John G. Avildsen dirigiría esta historia escrita e interpretada por Stallone.
La historia narra la búsqueda del sueño americano por parte de Rocky Balboa, un italoestadounidense de clase baja que se dedica a cobrar los créditos de un prestamista de Filadelfia. Rocky tiene talento para el boxeo, y tendrá la oportunidad única de combatir por el título de los pesos pesados. El reparto de la película se completa con Talia Shire como Adriane Pennino que aparece en la saga de “El Padrino“, Burt Young como Paulie (el hermano de Adriane), Burgess Meredith como Mickey Goldmill (su entrenador) y Carl Weathers como Apollo Creed, el campeón mundial y rival de Rocky.
A pesar de todo, en la película final hubo algunos cambios respecto al guion. La historia original tenía un tono más oscuro y triste. El entrenador de Rocky, Mickey, tenía un perfil claramente racista y el guion acababa con Rocky abandonando el boxeo porque no quería tener nada que ver con los métodos y la dinámica que envuelven el boxeo profesional.
El sistema de filmación fue con una cámara Steadicam, una cámara sujeta a un sistema de suspensión isoelástica para evitar que se moviera cuando el operador lo hacía, fue utilizado por primera vez en esta película en la escena en la que Rocky se entrena subiendo las escaleras del Museo de Arte de Filadelfia.
La escena del combate final fue rodada en orden inverso, iniciándose con los actores cubiertos de maquillaje para simular la sangre y las heridas, y retirándolo poco a poco hasta llegar al principio del combate.
El presupuesto era muy escaso y sin permisos para rodaje y grababan desde una furgoneta mientras entrenaba o buscaban formas alternativas para conseguirlo, y eso se nota en la película.
Además, la película excepto el final donde hay acción, es una película dramática, costumbrista, de gente pobre y marginal, y Rocky representa al personaje carismático que todos conocen y que ayuda dentro de sus posibilidades a sus semejantes. Se cuenta la historia de Adriane que es una joven tímida que trabaja en una tienda de animales y se enamora de ella. Vive con su hermano Paulie, que trabaja en una carnicería y la maltrata psicológicamente y insulta constantemente como una fracasada solterona.
El prestamista para el que trabaja Rocky es bastante bonachón y no nos lo creemos mucho. Y Apollo Creed, el campeón del mundo hace un papel chulesco que refleja bien la diferencia de clases y la diferencia de boxeadores. La oportunidad de poder disputar el campeonato del mundo porque el contrincante de Apollo se lesiona y buscan alguien carismático y que sea local para darle una oportunidad, al americano medio. Como dicen allí el sueño americano, de que todo es posible.
